VENEZUELA, UN PAÍS EN SHOCK
Había sido el lunes 30 de septiembre cuando un
campesino, César Guédez, humilde como todos y trabajador como ninguno,
regresaba siguiendo el sendero habitual para llevar la leche a casa de su mamá
y guardarla allí para sus hijos. El dueño de unas vacas había acordado que él
cuidase de unos animales a cambio del sustento lácteo. Todos los días lo hacía
y regresaba en penumbras, hacia 4 o 5 de la madrugada. Ese día debía llevar sus
pimpinas cargaditas, como siempre, hasta que se topó con una guaya de alta
tensión atravesada en su trayecto. Obvio que no la vio pues esa noche ni la
luna se asomó. La descarga lo inmovilizó de inmediato. Y lo retuvo durante
horas.
Poste de donde se soltó la línea. Está en lo alto de una colina |
La tragedia hubiese sido mayor, si una prima no
hubiera logrado despegar tanto a la mamá como a la hermana, pues ya salido el
sol la esposa lo buscó en casa de la mamá de César, y tanto la mamá como la
hermana desandaron el camino que él siempre hacía. Bajaron hacia la vega y lo consiguieron
en el suelo, a un lado de un frondoso árbol de tamarindo, no saben si
inconsciente o ya muerto. Y se lanzaron a ayudarlo. La hermana se acercó y dice
que una fuerza la arrastró hacia la guaya. Algo parecido debió ocurrirle a la
mamá. Más atrás venía una prima. Y luego otro hermano, renqueando con
dificultad. Había sufrido una lesión, por lo que el paso de los demás para él
eran gigantescos. Pero la voz hizo lo que los pies no podían y alcanzó a la
prima: “no las vaya a tocar, sepárelas con un golpe”. Y providencial, como si
se tratase de un artilugio de utilería, hay estaba un rolo de madera de metro y
medio de longitud. Fue la herramienta ideal para salvar golpeando.
No fue sino hasta el jueves 3 de octubre cuando nos
acercamos a acercarnos a la zona. Algunos medios habían difundido días antes la
versión que se trataba de un sujeto que murió electrocutado cuando intentaba
robarse unas guayas. No era así. La familia nos relató los incidentes con toda
precisión. Al final era un tendido eléctrico que mostraba síntomas suficientes
como para haber sido sustituido hace tiempo. Había personas que hablaban tanto
de ruidos como de chispazos que provenían de los cables. La familia decía que
debía tener unos 40 años desde que lo instalaron, sin que nadie recordase haber
visto algún mantenimiento preventivo en todo ese tiempo. Las camionetas de Corpoelec
se cuidan de no perderse por esa zona.
Árbol de tamarindo. Del otro lado el Sr. Guedez se tropezó con la guaya |
Relataron que el domingo fue un día con varias
interrupciones eléctricas. La gente ya espera que el servicio falle al menos
una vez al día, dada la inestabilidad del sistema eléctrico nacional y la sinrazón
ni orden en que ocurren los racionamientos, sin posibilidades de distinguir de
los apagones (eventos accidentes y masivos de corte de luz). Así que lo extraño
había sido la inestabilidad mayor de ese día. Solo eso. La electricidad iba y venía.
Foto tomada a unos 4 metros de donde pasa la línea eléctrica |
…
Ya al final de la tarde, en aquel regreso, de estas y
otras cosas íbamos comentando... No solo el problema del servicio eléctrico, en
este caso mortal, sino también el abandono en que descubrimos en esas
comunidades: la precaria educación de los niños de la zona, aunada al
ausentismo de los docentes, en otros tiempos sin excusa y en estos tiempos por
lo mal pagados y la imposibilidad de un transporte adecuado. Una semana de
clase puede reducirse, en el mejor de los casos a 3 días. Un año escolar puede
equivaler a varios meses incompletos. Un
programa de estudios puede limitarse a cuatro conocimientos y una
promoción escolar… que hace dos años incluía un evento, con un protocolo rural
de promoción y el pago a las organizadoras que, por supuesto, coincidía con las
maestras. El año escolar comenzaba tarde y terminaba temprano, hacia mayo y no
en julio.
Quizás el otro problema notable era el agua. Según
alguno de los pobladores, el agua comenzó a escasear cuando se buscó subsanar
la escasez de agua en urbanismos como Aves
de Yucatán, un desarrollo, correspondiente a la Misión Vivienda e impulsado
por Corpolara (la gobernación paralela a cargo de Luis Reyes Reyes, en tiempos
en que era gobernador oficial era Henry Falcón en el estado Lara), que, como el
urbanismo Alí Primera, ambos proyectos emblemáticos para el gobierno nacional
(“desarrollos socialistas”). El suministro de agua no estaba garantizado y se
requería inversiones que, según Henry Falcón, le fueron negadas. Así que la
solución era traer esa agua del municipio Crespo, afectando la zona que
habíamos visitado.
Actualmente los habitantes de la zona no reciben agua
por tubería, sino que ocasionalmente se las llevaban en camiones cisterna. La
última vez, contaba alguno de los moradores ese día, luego de mucho tiempo, los
camiones llegaron con un agua sucia, los vecinos optaron por botar (ese
servicio es pago y caro, o sea, no lo ofrece el Estado como forma de compensar
la carencia del suministro).
Dicen los pobladores que fueron a hablar con la
alcaldesa de Crespo, Leída Crespo, sobre su problema y prometió acudir a
la zona. Alguien pidió que firmara como recibida la comunicación que había
entregado los pobladores, y ella se negó. Según ellos, ella afirmó que era la
alcaldesa y ella no tenía que firmar nada, que si ella decía que iba a ir, es
porque iría… como en verdad no fue. Varias personas afirmaron que en otra
oportunidad les dijo a los pobladores que ellos tenían unas lagunas, que no
necesitaban el agua.
Palo que sirvió para salvar la vida tanto de la madre como de la hermana del Sr. César Guédez |
Lo cierto es que desde años anteriores se dijo que el
desarrollo de complejo urbanístico Aves de Yucatán, mejor conocido como
Yucatán, podría tener un impacto en los habitantes de Crespo. No se hicieron ni
permitieron inversiones para paliar la situación: el 18 de octubre del 2014 lo
reportaba el periódico El Impulso (Discuten
tema de agua y cloacas para Aves de Yucatán) y con bombos y
platillos parece que 10 días después la gobernación anunciaba proyectos de
inversión (página
de Facebook de la gobernación de Lara). Cuatro días después,
es decir, el primero de noviembre, el secretario de gobierno Teodoro Campos
anunciaba los montos estipulados para la ejecución, que aliviaría a varios
sectores, entre ellos a los pobladores del municipio Crespo (página
de Facebook de la gobernación de Lara). En el contexto del
final de las protestas del 2017 y la supuesta elección de los diputados a la
Asamblea Nacional Constituyente (30 de julio), se realizaron elecciones a la
gobernación (15 de octubre): el gobernador de entonces, Henry Falcón, candidato
a la reelección, el 25 de agosto volvía a prometer agua para el norte del
estado (Noticias
Barquisimeto). En el presente año, según parece, la
gobernadora Carmen Meléndez simplemente el 6 de junio otorgó el servicio de
agua a dichos complejos urbanísticos sin que le temblara el pulso o se
percatara de la repercusión entre las comunidades de Crespo (Activación
de segundo tramo de la Matriz Norte garantiza suministro de agua en 70
comunidades de Barquisimeto, información en VTV, el canal de
televisión oficial del Estado).
Los vecinos nos llevaron a las llamadas lagunas: pozas
de agua al borde de la pestilencia, propias para abrevar el ganado o regar los
cultivos. Un recorrido de unos 150 o 200 mts en un plano inclinado de 30 o 40
%. Lo verdoso es lo más llamativo, además de ser aguas recluidas entre montañas,
sin manera de reciclarse o removerse.
Enfermedades cutáneas se han reportado. Cuestión del
todo previsible. Los lugareños hacen suya la sabiduría de los pueblos de las
regiones desérticas del norte de África, cercano Oriente y del sur de España en
tiempos remotos: usar el agua de lluvia… cuando llueve. las canales de los
techos crean pequeños sistemas de recolección que conducen el agua a tanques y
cisternas superficiales, hechas en plástico o de concreto… Es el agua del
cielo, que Dios manda, según palabras de alguna lugareña…
La inverosímil cotidianidad de Venezuela
De los recuerdos recientes e impotencia para influir buenamente,
pasamos a conversar, en los kilómetros que nos faltaban para volver a la
ciudad, sobre otros pormenores… no, por cierto, menos sorprendentes. Además del
tema de la dolarización de la economía, de cómo va creciendo la destreza para
convertir los bolívares en dólares, está el dato-sorpresa: hacer un mercado
en la ciudad colombiana de Cúcuta resulta más económico, viviendo en
Barquisimeto, que hacerlo en Venezuela. Son unos 700 kilómetros. Sabía de
gente que había ido a la frontera, venciendo toda clase de trabas, para luego regresar
esquivando las pesquisas y caprichos de la Guardia Nacional. Todo con el fin de
poder obtener detergente para varios meses, o el uniforme escolar, o algunos útiles
escolares…
Y me asombró que en la frontera 100 dólares valen
distinto, al cambio, si se trata de un solo billete, en 2 de 50, o en 5 de 20,
10 de 10, 20 de 5. Cada billete tiene un valor de cambio distinto. Cuestión que
no ocurre, por supuesto, en cualquier otro país civilizado de Occidente (por no
decir del mundo). La divisa norteamericana es tratada como auténtica mercancía,
por lo que el cambio varía de acuerdo con la denominación del billete que
ofrezcas o te ofrezcan, según sea más o menos cotizado, o que tenga más o menos
demanda, que circule más rápido en el juego de la compra y venta…
Un cielo encapotado cubrió nuestra llegada a la ciudad.
Poco después de dejar a la periodista, fui testigo de un espectáculo inusual:
un arcoíris completo adornaba la ciudad, como si se tratase de un elemento
arquitectónico en una bóveda medieval. En esta salvaje realidad, donde la
muerte de un campesino no tiene valor (fuentes confiables me informaron que Corpoelec,
la compañía eléctrica del Estado, algún año atrás en estos casos prefería indemnizar
a hacerle mantenimiento a las líneas…), como la muerte de niños, el sufrimiento
de miles de personas, las enfermedades que van comiendo y erosionando tanto el
cuerpo como el alma… pudiese ser consolada por un fenómeno natural de tan magna
belleza. Para quien la vida es un acaso, es una de las tantas casualidades.
Para quienes somos creyentes, es una señal de la Providencia que invita a
seguir adelante siendo fieles al Evangelio…
Viuda del Sr, Guédez |
El cansino día a día de la política
El panorama político nacional luce bastante paralizado.
Se dice de los avances a nivel internacional. Claro que ha habido maniobras
algo más complacientes con los sectores vulnerados, pero parecen ser simples
amagues antes de que arrecie nuevamente la represión.
Soy de los que está convencido que el principal activo
del régimen es ganar tiempo. Al no tener talante democrático, esperar no
representa problema. Además, que, como diría J.J. Rendón, Venezuela es el sueño
cumplido de cualquier delincuente: tener su propio país. Por eso es difícil que
suelten lo que ya tienen. Y, como lo tienen, su único propósito es seguir
teniéndolo… o asegurar retenerlo.
Mientras tanto el tablero hemisférico se sigue
moviendo: en los Estados Unidos Trump se sigue jugando el impeachment.
No parece que ninguno puede amenazar al estilo Trump, con el detalle que la
opción militar, posibilidad en otros momentos parecía real aunque no deseable,
el mismo Trump no gustó de manejar. Es un empresario que sabe lo que cuesta en
términos económicos y de popularidad. Si bien el tipo de guerra ya no es la
convencional, no por ello resulta alentador embarcarse en una aventura sin
poder medir las consecuencias reales o saber cómo se va a salir de ella.
Las posibilidades de Macri de remontar la
contienda electoral lucen remotas cuando no improbables. Ese es un aliado de la
causa libertaria que, por razones estrictamente internas a la Argentina, va a
perderse.
El sismo político de Perú también complicó su
política exterior, más cuando la inmigración venezolana fue utilizada como detonante
de la pugna entre el poder legislativo y el poder ejecutivo. Habrá que ver qué
pasa.
Evo Morales,
en Bolivia, aspira a repetir. Surge la duda si va a repetir con la mayoría o
sin necesidad de que la mayoría apoye un cuarto mandato. Porque si ya se le
había negado en consulta
popular la posibilidad de ir a una nueva reelección. Y está yendo ¿Por cuál
razón va a detenerse por un problema de números, fácilmente corregible? Lo
decía Stalin: no importa quien vote, sino quién cuente los votos.
La situación brasileña también luce desacertada: Bolsonaro
es un líder advenidizo fruto de un atentado, de la desgracia de Lula y
la prohibición a Dilma de participar en las elecciones ¿qué hubiera sido
de él sin la puñalada trapera? Más allá de valorar los logros y fracasos tanto
de Lula como de Dilma, la estrategia política usada no parece haber sido acorde
a la democracia que se dice querer defender. Puede que las agendas socialistas,
sobre todo las que rayan en ciertos extremos o que manifiestan complicidades o
solidaridades automáticas con regímenes tan déspotas como el venezolano no sean
convenientes, pero tampoco es sano usar estratagemas de este tipo para “salvar”
las sociedades. En mi opinión sería triste lo que le escuché a una persona:
deberían votar solo los que tengan algún grado de instrucción. La votación
siempre debe ser universal. Y la educación también. Solo habrá educación del
tamaño de la democracia cuando quienes han sido educados sepan pensar críticamente,
aun en contra de sus mismos educadores, sean estos pedagogos, políticos o
sacerdotes.
La última perla, como si se tratara del final de temporada
de una telenovela, ocurre en Ecuador. El fantasma del FMI vuelve a
asomarse (y no solo en la Argentina de Macri) para ofrecer una receta
inconsulta. El gobierno de Lenin Moreno parece que la adoptó sin muchos
reparos a lo que pensara el pueblo ecuatoriano, particularmente el indígena. Y
tal presunción casi que lo entierra políticamente. El diálogo facilitado por los
entes de Naciones Unidas y la Iglesia no solo le dio resultado. Si mantiene un
buen pulso puede transformarlo en el líder que aúne los distintos sectores del
Ecuador. Habrá que esperar a ver qué pasa.
Laguna donde recogen agua los pobladores de Los Pocitos |
Si bien se debe partir de una premisa, y es que FMI es un ente crediticio y no una sociedad de beneficencia, sus sugerencias están dirigidas por diversas motivaciones: ellos no van a entregar un dinero sino a un proyecto que se adecúe a su visión de mundo y, sobre todo, a poder recuperar su dinero.
Pero la segunda lección, que de paso es obvia, es que
cualquier cambio por necesario que sea (la gasolina no puede regalarse en
ninguna parte del mundo) necesita ser presentado adecuadamente por los actores
políticos e, inclusive, negociado en el mejor de los términos, con las
organizaciones que representen a la sociedad, en este caso, la de Ecuador.
Presupuesto este que debería exigir, si no es mucho pedir, un mínimo de
confianza y sentido del bien común. Sino es imposible, porque unos y
otros van a tender a boicotear cualquier iniciativa, por buena y santa que sea.
O sea, la responsabilidad ciudadana no equivale a defender el trozo de tierra
que a cada quien le corresponda, sino un sentido vertiginoso de querer
esforzarse por mejorar las sociedades, donde cada quien deba aportar algo y
sacrificar algo, como para que la situación final sea mejor que la primera.
Pero si cada quien se siente timado o tiene la tentación del timador, difícilmente
se pueden hacer reformas necesarias que esquiven las penurias del futuro.
Finalmente, está el poderoso movimiento indígena
ecuatoriano, que tiene que ver con la tierra y su cultivo. Es un partner
nada despreciable que, por otro lado, debe exigir una buena cuota no solo en
las decisiones políticas finales, sino en la debida información y
negociaciones. No para chantajear o coquetear con el estamento político, sino
para ser tomado en cuenta. Y esto sin que implique que la sociedad vaya a
quedar condenada a un inmovilismo paralizante y castrador.
¿Y el Foro de Sao Paolo?
Se dijo que hubo participación en el caos ecuatoriano
del expresidente Correa y de Nicolás Maduro… que equivaldría a
decir que la isla, la de los Castro, pudiese tender sus tentáculos. Un
amigo sociólogo planteaba la visión de que el Foro de Sao Paolo no era tan
poderoso como para crear levantamientos… ni el Foro ni ninguno de sus socios.
Creo que es a convenir. Pero la izquierda internacional, en una metodología
que, hasta cierto punto, pudiese ser admirable sino fuera por lo temible, basa
sus decisiones y estrategias en el análisis de las contradicciones, que dividen
entre objetivas y subjetivas. Las objetivas, para quienes confiesen el credo
comunista, tiene que ver con aquellas inherentes al sistema capitalistas (que
ellos postulan, a pie juntillas, que tiene en sí el germen de su
autodestrucción) y que en algún momento pudiesen decretar su defunción. Las
subjetivas, a la conciencia popular dispuesta a levantarse en revolución contra
las clases dominantes, explotadoras y opresoras.
Los agitadores de viejo cuño aspiran a estar presentes
en cuanto conflicto haya, a fin de atizar las brasas para que arda la
revolución. No es descabellado que haya habido grupos correístas entre quienes
generaron disturbios, como que pudiesen estar presentes venezolanos vinculados
con el régimen de Nicolás Maduro. Las olas migratorias dan para que salga gente
desesperada como también agentes que busquen monitorear cualquier plan en
contra de la elite gobernante en Venezuela, como puede servir para filtrarse en
países que hayan sido críticos y desestabilizantes de la imagen internacional
del régimen de Maduro. El antecedente se puede conseguir en Europa, donde
dentro de los grupos de inmigrantes podían estar entrando en Europa radicales
islamistas.
De regreso a Venezuela
Se puede completar el panorama general regresando a
Venezuela. Se ve las maniobras
aparentemente insensatas del gobierno madurista: entre alcaldes y gobernadores
del régimen buscan cambiar los nombres tradicionales de estados, parroquias o
autopistas. La técnica de cambiar de nombre es una manera de borrar la historia
de una avenida, por ejemplo. Si tal calle ya tiene otro nombre, no podré
identificar en ese sitio tales acontecimientos del pasado, por ejemplo. Pero
también tiene que ver, como alguien aseveró, con la manía adamita de estar
iniciando cada tres días una historia nueva, como una nueva creación, impoluta
del pasado perverso. Pueden ser formas también, puesto que en algunos casos se
ha hecho a través se seudo-consultas electorales, como una manera de probar la
oposición o aceitar la propia maquinaria partidista, como para evaluar los
riesgos de una contienda electoral. Pero me parece que tiene que ver también
con una especie de repolarización de la sociedad venezolana.
Si bien en el pasado el llamado cerro Avila fue
cambiado a parque, pocos se refieren a la montaña en dichos términos. Si no lo
hubieran oficializado, capaz que hubiese calado entre la gente. En fechas más
recientes, el estado Vargas, epónimo del segundo presidente de Venezuela, médico
y civil, que no participó de la guerra de Independencia sino que se fue a
estudiar a Londres y que se le debe el nivel de la educación en Venezuela,
sobre todo de medicina. Ese estado se llama ahora La Guaira, como el puerto,
voz de origen indígena.
En días pasados se hizo un semi-referendum para
cambiarle el nombre a la segunda mayor parroquia civil de Venezuela, la que era
la parroquia Juan de Villegas. No existía la opción del si quiero no no quiero
cambiarle el nombre. Solo existía la posibilidad de 3 cambios. La razón, que
tiene cierto fundamento, es la exaltación que en el pasado se hacía de los
conquistadores, a quienes se valora hoy en día, sobre todo dentro de las
ciencias humanistas, como auténticos genocidas. No puedo asegurar que sea el
caso exacto de Juan de Villegas, si pensamos por genocidas a alguien que
hubiese despoblado las regiones. Hay que tener en cuenta que la viruela hizo
mayores estragos que la espada española. Y Welsares sembraron de huesos los
caminos que iban a la costa. No así el fundador de Barquisimeto, hombre de
armas y con la mentalidad de los derechos de conquista, institución medieval
europea. Mas allá de las fuentes, complicadas sin más, no se excluye la cruel
condena a muerte al fuego de al menos un par de indios, Juan de Villegas fue el
fundador de Barquisimeto. Se quiera o no, la ciudad es un invento europeo que
seguimos consumiendo en esta tierra de gracia. Así que, si esta es una
población mestiza, tiene soberano rollo con la figura de su padre, pues, como devela
el psicoanálisis cuando recuerda el mito de Saturno devorando a sus hijos,
Júpiter detiene el filicidio propiciando la muerte de su padre, debiendo de
cargar con el complejo de culpa respectivo.
Manejar la bestialidad de los orígenes nos lleva a la
reflexión del conocido jesuita y teólogo de la liberación, el padre Pedro
Trigo: hay dos paradigmas para acercarse a los orígenes de este nuevo mundo
(descubrimiento o invasión y conquista y colonización). O la figura central es
el hombre-macho-conquistador-europeo que viola-mata-somete lo indígena, de tal
manera que todos somos hijos de una violación, o la figura central es la
mujer-madre y se valora el proceso desde el amor-enamoramiento-maternidad que
permite un nuevo origen a partir de lo mejor de ambas razas. Los orígenes del
nuevo continente, me refiero como realidad social sin negar su existencia
anterior ni los derechos de los pueblos originarios, puede valorarse desde el
amor (la belleza india enamora al europeo y lo que nace es fruto del amor, más
allá de los eventos violentos) o somos fruto de la violación, por lo que la
violencia está presente en los orígenes y nos persigue como una maldición que
se adueña de nuestros genes.
Por lo que sea, el motivo político pueda ser dividir a
quien se opone al gobierno y repolarizarlo cuando se pretenda ver la
solidaridad internacional como intentos de recolonizar el país. El llamado a
las raíces indígenas, por más que los indios vean a la población venezolana
como criollos, pretende romper los lazos culturales con occidente, puede que
ofrecer una educación manipulable y oponerse a lo extranjero como pretensión
del hombre blanco por colonizar, robar las riquezas del subsuelo y someter a la
población a un régimen de esclavitud.
Iluminando la oscuridad
Intento terminar este artículo en la oscuridad. Ya las
teclas casi me las conozco y, si tengo dudas, hay una linterna a mi izquierda.
Me he habituado a la pantalla, que bajo su brillo lo más que puedo. Y hago
votos que la batería me dure más que mis buenas intenciones e inspiración.
En esta tierra asombrosa se ve de todo: Nicolás
Maduro ofreciendo asignando minas productivas a alcaldes y gobernadores (los
suyos, claro), además de ponerle protectores (como los protectorados
colonialistas de antaño) a las zonas donde el poder ejecutivo esté en manos de
la oposición. Dice que las minas son para costear el presupuesto de cada
entidad. Al menos la suspicacia de más de uno no permite lo que considera tamaña
ingenuidad. Algo dirá la letra, pero se oye como un botín ¿quién con su la
rapaz fama no va a ceder ante un beneficio tal que recuerda los tiempos de Juan
Vicente Gómez, el tirano con mano de hierro que gobernó Venezuela hace 100 años
atrás?
En Naciones Unidas
Hoy la principal noticia en Venezuela fue
el ingreso en el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
Cuestión que va a ser aprovechada por el régimen para confundir a la población,
tanto a propios como a extraños. Puesto que se tiene poca información, lo que
es un hecho vergonzoso para el ente multilateral, sin embargo, siguió las
formas debidas. Venezuela comparte 47 curules con países de todo el globo, de
forma equitativa. Por esta esquina del mundo se encuentra también Brasil. Y
viene a sustituir a Cuba. Queda la pregunta si, con el informe Bachelet, lo que
se considera como un logro no va a ser una forma añadida de descubrirse ante el
mundo como lo que son: un grupo de trúhanes que pretenden ofrecer trucos de prestidigitador
para hacer desaparecer los recursos de los países, sin el mínimo preparación y
con el solo talento de hacer juego de manos…
Venezuela obtiene un asiento en el Consejo… mientras
que en Venezuela se recoge en el mismo día el cadáver carbonizado de Edmundo “Pipo”
Rada, concejal y miembro del partido Voluntad Popular. Dicen que consiguieron
su cuerpo con dos balas en la cabeza. Se especula la causa. Lo cierto es que el
concejal llevó al presidente del Parlamento, Juan Guaidó, a la barriada más
numerosa de Venezuela, que está en el municipio Sucre de Caracas: Petare ¿habrán
querido cobrarle la temeridad?
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